Este domingo se enfrentan dos equipos que buscan darle la vuelta a su semana competitiva después de las derrotas sufridas a lo largo de la misma. Casademont llega sin apenas descanso y encajando una abultada derrota contra Valencia Basket y Baskonia con semana negra europea sumando 2 derrotas en Euroliga.
Ambos equipos llegan a la jornada 8 con el mismo balance: 3 victorias y 4 derrotas. Además presentan estadísticas similares en cuanto a la carta de tiro, siendo algo mejor desde el 6,25 Baskonia y por su parte Casademont toma la delantera en tiros de 2. Y sobre todo tienen un problema localizado: encajan demasiados puntos y se muestran muy irregulares dentro de los partidos, acumulando una gran pérdida de balones ( casi 16 los locales y 13 los visitantes).
Desde el plano deportivo los maños esperan que Bell-Haynes y Dubi sigan siendo los guías en los que sujetarse todo el entramado ofensivo, siendo el capitán Santi Yusta su fiel escudero y donde el resto del plantel tiene que asumir responsabilidades defensivas para ser competitivos en todos los partidos. Jugaran con la baza ambiental y psicológica del Principe Felipe donde esta temporada todavía no han perdido en competición oficial. Por parte baskonista viajan con toda la plantilla al completo y Pablo Laso busca encontrar esa estabilidad necesaria en los resultados para que siga creciendo el proyecto. Tendrá en Sedekerskis el hombre multiusos y pegamento del equipo y el ataque caerá en manos de Markus Howard que si consiguen entre en combustión tiemblan todos los tableros ACB y de Europa. Además jugadores como Forrest y Hall ya han mostrado sus cualidades y Moneke querrá salir también en los titulares.
En definitiva, se espera un partido con una puntuación alta donde varios jugadores optarán a lograr grandes números tanto en anotación como en valoración. Además de lo deportivo hay una racha que está en juego, que Casademont Zaragoza siga manteniendo el invicto en el Príncipe Felipe y de paso cortar la mala racha con Baskonia que llevan casi 3 años sin ser derrotados por los maños.
