David Navarro, ex jugador ACB, y actualmente trabajando en una agencia de representación de jugadores nos atiende para repasar la actualidad de su vida, tu trabajo y parte de su larga carrera.
Siendo un ídolo en sitios como Andorra y tras acabar su carrera profesional en Obradoiro, el ex jugador catalán nos atiende para una interesante y extensa entrevista que esperamos que os guste.
Juan Antonio Rodríguez (JA) – ¡Buenas David! ¿Qué tal estás? Para los que te hayan perdido la pista, ¿Dónde te encuentras y a qué te dedicas?
David Navarro (DN) – Ahora mismo estoy viviendo en Santiago de Compostela. Mi mujer es gallega y mi última etapa como jugador fue en Obradoiro y ya decidimos quedarnos aquí. Tengo tres hijos que han crecido aquí y estamos muy a gusto. Al retirarme, había estudiado Ingeniería informática con un máster de datos y empecé a trabajar de ello, pero me di cuenta que no me apasionaba y al tener relación con una agencia de representación de jugadores (FreeAgency) y ahora estoy 100% con la agencia para ayudar a muchos chicos a ser profesionales.
JA – Has jugado al baloncesto profesional durante casi 20 años. ¿Qué es lo que más echas de menos de aquella época?
DN – Lo que más hecho de menos del baloncesto activo es la compañía de compañeros que tienen la misma pasión que tú. La convivencia es especial por el entorno y el día a día se disfruta mucho. El vestuario, las duchas, los viajes… no se hacen pesados porque se hacen bromas y te das cuenta que fuera de este mundo cuesta encontrar gente con las mismas aficiones.
JA – ¿Y qué es lo que menos echas de menos de dedicarte a este deporte?
DN – Lo que menos, cuando no te salen las cosas y estas sin confianza. Forma parte de cualquier ámbito pero más en el deporte donde tienes un examen cada semana y si no tienes ese punto de confianza son momentos duros.
JA – Sabemos que sigues vinculado al mundo del baloncesto. ¿Qué tareas haces y qué crees que puedes aportar?
DN – Ahora estoy vinculado totalmente con la agencia y nuestro objetivo es encontrar talento y con ganas de ser profesionales con personas al lado que puedan ayudarles. En mi caso me encargo de la parte del jugador, estar cerca e intentar relación con ellos y fijarme en los equipos para ver donde pueden encajar mejor. Luego mi socio se encarga más del trato con los clubes y equipos para hacer la parte contractual.
Puedo aportar en momentos de desanimo del jugador o que cree que no lo va a conseguir, hacerles ver que el camino es largo pero que siempre hay que seguir trabajando con buena actitud. No se debe perder la pasión a pesar de los momentos duros y no rendirse.
JA – Se hace mucho hincapié en la tecnificación. ¿Qué importancia le debemos dar y en tu caso qué intentas mejorar de cada jugador?
DN – Son muy importantes en etapa de formación. Luego ya en etapa más senior no es tan importante. Es muy importante a nivel mental para afrontar una temporada complicada y no venirte abajo. Pero está claro que en etapa de formación es clave.
JA – Repasando tus orígenes, ¿te hubiera gustado jugar más en el Basquet Manresa, ya que eres de una ciudad cercana y has vivido lo que es el Nou Congost?
DN – Está claro que es un sitio especial para mi, donde me formé como jugador y donde me cuidaron y me dieron la oportunidad de ser jugador profesional y debutar en ACB. Las cosas no fueron como yo me esperaba y que me hubieran gustado que fuesen diferentes con más años y haciéndome un nombre. Pero la vida va como va y bajando de categoría para llegar de nuevo a la élite me hizo más fuerte.
JA – Hace unos meses tuvimos la suerte de hacer la presentación del libro de Ricard Casas: Escucha tu Baloncesto: el valor del entrenador. ¿Qué nos puedes decir de Ricard?
DN – Referente a Ricard Casas es el entrenador que me ha marcado más en mi carrera, primero porque cuando llego a Manresa él estaba de coordinador de cantera. Ahí le conozco por primera vez y la verdad es que impresionaba. Cuando llego a edad sénior él estaba como entrenador del primer equipo y subía a ayudar al equipo y luego coincidí con él en Girona en LEB Oro y ahí me hace capitán y trabajamos mucho en aspectos para seguir creciendo y me trató como un padre para llegar de nuevo a ACB y ser allí un jugador importante. Le estoy muy agradecido por todo lo que hizo por mi.
JA – Posiblemente tu mejor etapa como profesional la viviste en Andorra. ¿Cómo ves al equipo este año y que faltaría para intentar estar un poco más arriba?
DN – Si, realmente mi mejor etapa fue en Andorra, fiché allí estando en LEB Oro, logramos el ascenso y ese primer año en ACB es cuando me consolido y mi nombre suena ya más fuerte en ACB y estoy dos años más completando un ciclo de cuatro años que hacen de Andorra un sitio muy especial para mi.
Ahora al ser agente tenemos más jugadores no en ACB, sino de categorías más bajas, por lo que sigo la competición pero no mucho y no puedo opinar demasiado. Sé que van en media tabla para abajo pero es que la ACB es muy complicada y es muy difícil sacar resultados.
La consolidación pasa porque la ciudad esté volcada por el equipo, inversores y que desde la directiva se sepan dar los pasos adecuados para ese pasito más y acertar con los fichajes para hacer un equipo competitivo.
JA – Desde que iniciaste tu época de jugador hasta ahora ¿cuál/es es/son las principales diferencias que has encontrado en el baloncesto? ¿Te gusta o echas en falta algo del pasado?
DN – La mayor diferencia es a nivel físico, con jugadores más preparados y con más capacidades y se apuesta por jugadores más fuertes, más grandes, más rápidos, y se basa mucho en el cambio entre jugadores, con más explosividad. Se juega más uno contra uno y con menos juego colectivo. Es algo que adaptamos en la agencia, buscando físico unido al talento.
JA – Por último, ¿dónde se ve David Navarro dentro de unos años? ¿Le pica el gusanillo de los banquillos?
DN – Ahora mi principal objetivo es ayudar a los jugadores de la agencia para hacerles crecer igual que nosotros como agencia para ir captando jugadores. Mi prioridad ahora también es la familia con mis tres hijos que me gusta educarlos.
Si que es verdad que tengo el título de entrenador y si que es algo que me gusta y que he hecho pero que me gustaría probarme a nivel profesional porque llevo muchos años en este mundo, tengo mis ideas y tengo claro como me gustaría entrenar.
JA – Gracias por tu tiempo y muchos éxitos en tus retos futuros.
DN – Gracias a vosotros por acordaros de mi y os seguiré.
Para acabar la entrevista hemos querido contactar con Ricard Casas tras las palabras tan bonitas que ha tenido David hacia él, y parece que el respeto y amor entre ambos es mutuo.
Ricard nos ha descrito a David como una persona que ha triunfado por su talante como persona y como jugador, que persiste en la mejora continua y que trabaja en su confianza y que sabe estar en los sitios, algo que le hace perdurar donde está.
Para Ricard se merece todo lo que ha conseguido siendo muy fuerte consigo mismo, con una ilusión que no ha perdido nunca, para demostrar su talento. Casas lo pone como ejemplo de jugador a seguir y cree que en su nueva función de manager lo sabrá hacer muy bien con los nuevos talentos. Es un modelo de actitud de nivel profesional muy algo para Ricard y eso lo sabrá trasladar a sus jugadores.

