Jota Cuspinera es uno de esos entrenadores eternos que siempre está activo en el mundo del baloncesto, ya sea dirigiendo equipos de primer nivel como enseñando a nuevos entrenadores a través de su conocimiento y experiencia.
Como siempre que contactamos con él, nos atiende con un discurso que da para mucho y que es un lujo por la claridad de sus palabras. Os dejamos de la mano de nuestro director Juan Antonio Rodríguez esta interesante y extensa entrevista con el bueno de Jota.
Tomad asiento y disfrutad con esta gran entrevista.
Juan Antonio (JA) – ¿Qué tal estás? ¿Para quién te haya perdido la pista, a qué se dedica ahora Jota Cuspinera? ¿Qué proyectos tienes entre manos?
Jota Cuspineta (JC) – Estoy muy bien y me dedico a lo mismo, ser entrenador profesional pero sin dirigir a ningún equipo profesional, esperando a que me llegue una oferta que me satisfaga. Al mismo tiempo formo entrenadores algo que he hecho durante toda mi vida. Estoy ayudando a otros entrenadores en la plataforma Basketball Insights y hago de mentor individualmente a algunos entrenadores de distintos niveles.
JA – ¿Qué te llama la atención a la hora de comentar? ¿Transmitir conceptos tácticos a los espectadores?
JC – Comentar partidos es otra forma de hacer baloncesto. Intento ser capaz de transmitir a los espectadores desde el punto de vista de un entrenador profesional que es una forma de ayudar a entender lo que sucede en la cancha. Ver más allá de lo que ve el aficionado sin llegar a profundizar mucho pero trato de acercarle a cómo lo vemos los profesionales.
Busco transmitir aspectos tácticos pero sin meterme en mucha complicación con aspectos tácticos y técnicos que pueden hacer los jugadores, que parecen fácil y no lo son.
JA – ¿Cómo vive un entrenador con tanta experiencia los meses alejado de los banquillos? ¿Qué es lo que más echas de menos y lo que menos?
JC – No es fácil estar alejado de los banquillos porque lo de entrenar se lleva en la sangre. El día a día del entreno y la adrenalina de la competición, los aficionados y todo lo que rodea al entreno de un equipo y celebrar victorias. Es algo que disfrutas cuando lo tienes y cuando no lo tienes lo echas en falta.
Lo que menos hecho de menos me lo voy a quedar para mí. Siempre hay cosas que no gustan a lo que rodea esta profesión. Las críticas gratuitas de cosas sin importancia no las hecho de menos a pesar de ir adheridas a nuestra profesión. Por suerte yo no he sido insultado pero sé de compañeros que sí y pagar una entrada no da derecho a ello.
JA – Te conocemos como un gran entrenador de formación y ahora veo que estás haciendo cursos para entrenadores. ¿Cómo disfrutas más? ¿Enseñando a jugadores o a entrenadores?
JC – Crecí siendo entrenador de formación pasando por todas las categorías de formación, siendo entrenador y ayudante en casi todas las categorías y hace mucho que no entreno a jóvenes pero me siento cercano de la formación al ayudar a formar entrenadores de formación. Siempre he llevado en paralelo ser formador y entrenador desde los 19 años con los cursos de formación de la FEB. Tengo mis cursos online donde hablo del juego colectivo desde el punto de vista del “spacing” y de la táctica. Así que tanto formar como entrenar me llena y me hacen sentir entrenador.
JA – ¿Qué diferencias encuentras entre la formación de entrenadores actual y la que se hacía antes?
JC – La principal diferencia en la formación de antes y la de ahora es que ahora disponemos de Internet y tenemos mucha información a nuestro alcance con un click y antes debías irte a clinics y moverte para aprender. El peligro de esto es la calidad de la información, ya que hay de calidad pero también otra que no lo es y un entrenador que empieza a formarse no tiene capacidad para discernir qué es importante y que no. Otro peligro es creer que tener información es saber, pero la información hay que ponerla en práctica para saber pros y contras de lo que aplicas.
JA – ¿Y en la formación de jugadores? Vemos que desde pequeño se hace mucho hincapié en la tecnificación.
JC – La formación de jugadores se basa en dos premisas fundamentales: la técnica individual y el juego colectivo. Sin uno de estos dos pilares es muy difícil jugar a este juego bien. Los recursos individuales son necesarios para poder jugar pero se debe juntar con una táctica.
Cierto es que ahora la técnica individual ha generado un negocio, que me parece bien para mejorar la técnica, pero algunos entrenadores enseñan cosas de técnica que luego no tienen aplicación en el juego real. Se debe distinguir lo que es una formación de calidad con otra que no lo es tanta.
JA – ¿Qué es lo que más destacarías a la hora de enseñar a los más jóvenes?
JC – A los más jóvenes lo ideal es enseñarle habilidades básicas a través del bote si es con balón y a colocarse y moverse cuando se juega sin él. Hay que saber pasar bien y no se dedica tanto a la importancia del pase que es lo que diferencia a los jugadores muy buenos de los buenos. Es cierto que la gran estrella es la capacidad anotadora y se debe incidir mucho pero no debemos olvidar la defensa para que el rival no pueda anotar tanto. Así los pilares serían el bote, el pase, el tiro y la capacidad defensiva.
JA – En una de estas primeras jornadas de la Liga Endesa hemos vivido un récord negativo de minutos por parte de jugadores nacionales. ¿Dónde crees que radica el problema y una posible solución?
JC – El tema de minutos es sencillo. En ACB nos hemos globalizado por la legislación al estar en la UE y existir también los acuerdos Cotonús. Compites con un mercado mayor. A nivel personal tengo una visión particular que aprendí al llegar a selección nacional: la mejor forma de proteger al jugador nacional no es asegurarle minutos por ser nacional sino que sea mucho mejor que aquellos a los que se enfrenta. Se debe mejorar el nivel del jugador nacional. Por ejemplo nadie dudaría de que Navarro fuese a jugar porque era muy bueno y siempre competía con todos los que venían. Si ahora juegan menos es porque a lo mejor no pueden competir con ese entorno globalizado.
JA – ¿Has tenido contacto con algún equipo para dirigir este año? ¿Has valorado la opción de la salida al extranjero en algún destino exótico?
JC – He tenido contactos para entrenar pero al tener las entrevistas para llegar a un acuerdo he visto que el proyecto no era el indicado y he rechazado alguna oferta. Tengo ofertas del extranjero que de momento no me convencen y prefiero seguir esperando a coger una oferta en la que creo que pronto estaría incómodo. Antes a lo mejor no lo pensaba tanto pero ahora busco que esté todo alineado para firmar.
He tenido ofertas de destinos exóticos, algunas en tema económico mucho más importantes de las que he podido disfrutar en ACB. El nivel de baloncesto no es el mejor pero no lo rechazo por eso, sino porque no me llenan esas propuestas de momento. Escucho las ofertas pero de momento no he considerado que era el mejor momento para unirme a un proyecto.
JA – Por último, ¿qué consejo mandarías a los entrenadores que empiezan ahora y se forman soñando en llegar algún día a lo más alto?
JC – A los entrenadores que empieza les digo que sueñen todo lo alto que quieras pero piensa que lo que determina lo bueno o malo que serás es lo que mejorarán tus jugadores y tus equipos y debes intentar hacerlo lo mejor posible en el momento actual poniendo el foco en tus jugadores e ir creciendo poco a poco. Luego seguro que mirarás atrás y algunas decisiones las hubieras tomado de forma diferente, pero eso es parte del conocimiento.
En cada nivel hay ojos mirando. Si mejoras a tus jugadores y equipos habrá gente que te verá y decidirá darte una oportunidad. Debes hacer crecer a tus jugadores y alguien te dará la oportunidad en algún sitio mejor si te lo mereces. Hay que trabajar duro, adquirir conocimiento y apoyarte en otros entrenadores. Llegar a la élite depende de muchas cosas. Todos los que están en la élite son muy buenos, pero no todos los muy buenos están en la élite. Hay un grupo de unos 30 entrenadores que pueden llegar a la élite y es como una oposición donde solo entran los mejores.
Agradecer a Jota su tiempo y desearle lo mejor en sus proyectos actuales y esperando pronto verle en un banquillo ya sea de nuestro país como de otro.