Liderados por Loyd y Ponitka el combinado polaco doblegó a una Eslovenia en la que la exhibición Doncic no fue suficiente.
Polonia volvió a ser la kryptonita de la Eslovenia de Doncic, como ya ocurrió en el pasado Eurobasket. En esta ocasión, el espectacular acierto de Loyd y el gran desempeño de Ponitka, siempre destacado con la camiseta de su selección, fueron suficientes para frenar el partidazo de la superestrella eslovena, que se fue hasta los 34 puntos, 9 asistencias y 5 robos. Entre el público se encontraban Jeanie Buss, presidenta de Los Angeles Lakers, y Rob Pelinka, manager general del equipo angelino.
El partido arrancó con los nervios e imprecisiones típicos del primer encuentro de un torneo, pero con el paso de los minutos ambos equipos fueron encontrando su ritmo de la mano de sus grandes estrellas. Loyd y Ponitka empezaron a desatarse, mostrando su acierto y generando peligro constante, lo que permitió que Polonia tomara la iniciativa en el marcador. Ni siquiera los 14 puntos de Doncic lograron frenar el empuje rival, y los polacos se fueron por delante al cierre del primer cuarto (25-29, min. 10).
En el segundo cuarto, Polonia no bajó el ritmo y supo aprovechar primero el descanso de Doncic y, más tarde, un golpe que le dejó dolorido para ampliar su ventaja. Un inspiradísimo Loyd, que se marchó al descanso con 19 puntos, abrió brecha en el marcador, pero entonces aparecieron los secundarios eslovenos para sostener a su equipo. Los triples de Radovic, Hrovat y Prepelic devolvieron a Eslovenia al partido e incluso le permitieron ponerse por delante. Sin embargo, una canasta sobre la bocina de Laczynski devolvió la iniciativa a los polacos antes de llegar al descanso (48-49, min. 20).
Tras el paso por vestuarios, Polonia salió con una marcha más y rápidamente abrió brecha en el marcador (49-62, min. 24). Doncic seguía sumando puntos, pero su esfuerzo no bastaba ante el vendaval ofensivo polaco —33 tantos anotaron en este cuarto—, lo que acabó por desesperarle hasta el punto de recibir una técnica por protestar a los árbitros. Pluta y Balcerowski asumieron el protagonismo ofensivo en Polonia y la ventaja superaba la barrera de los dobles dígitos antes de entrar en el último periodo (69-80, min. 30).
En el último cuarto, Eslovenia salió decidida a remontar. Los esfuerzos de Muric acercaron a su equipo hasta los 7 puntos (75-82, min. 32), pero entonces volvió a aparecer Ponitka, quién si no, para ejercer de apagafuegos. Doncic no estaba dispuesto a rendirse y con un par de genialidades volvió a recortar distancias, manteniendo viva la esperanza eslovena. Sin embargo, en los minutos decisivos emergió de nuevo la figura de Loyd: su espectacular tramo final, con 12 puntos en los últimos cinco minutos, acabó por sentenciar el duelo y darle a Polonia una nueva hazaña, tumbando otra vez al equipo esloveno (95-105, min. 40).
95 ESLOVENIA (25+21+23+26): Doncic (34), Hrovat (15), Prepelic (8), Radovic (3), Omic (7) -cinco inicial- Jurkovic (-), Krampelj (4), Muric (17), Nikolic (5), Padjen (0), Scuka (0), Stergar (2).
105 POLONIA (29+18+33+25): Pluta (15), Loyd (32), Ponitka (23), Sokolowski (8), Balcerowski (11) -cinco inicial- Dziewa (0), Gielo (4), Łączyński (4), Michalak (0), Olejniczak (2), Zapala (-), Zolnierewicz (6).