Adrian Eguizabal
La victoria de Chemnitz frente a Bahcesehir Koleji en la actual FIBA Europe Cup nos ha hecho descubrir a un equipo diferente, con un estilo muy marcado y mucha vistosidad.
Estos argumentos suman a un Niners Chemnitz que ha sido el flamante ganador de esta competición, superando a los españoles Casademont Zaragoza y Bilbao Basket.
Un equipo que tiene dejes de ese Telekom Bonn que ganó la Champions League pasada: un conjunto basado en el small-forward, con una base de americanos muy marcada y que el ritmo de partido es rapidísimo.
Kevin Yebo, polivalencia interior
Y lo mejor y lo más interesante es ver que es un equipo muy coral y donde todos (o prácticamente todos) pueden tirar desde fuera. Ningún jugador tremendamente joven, pero todos con madurez, destaca entre ellos Kevin Yebo.
Os resultará paradójico, pero este es su jugador más alto, y eso que “solo” mide 2.07. No obstante , la falta de envergadura la suple con un gran atleticismo y una más que correcta mano de 3. Sus números son para que equipos de más rango apuesten por él: 17.1 puntos y 5.6 rebotes en apenas 22 minutos de juego.
Van Beck, capacidad anotadora al servicio del equipo
Van Beck es otro cañonero a tener en cuenta. Nacido en Houston, Texas, destaca por ser un buen tirador de todas las posiciones, y ser un jugador con buena decisión para penetrar, especialmente de izquierdas siendo diestro. Otro proyecto que ha sido clave para la consecución del titulo de Chemnitz.
Jeff Garrett sería otro de esos jugadores que atrae. Para el espectador neutro es uno de esos jugadores de rol muy concreto, un 3/4 fuerte, fajador que este año se ha ido a los 13.5 puntos y 7.7 rebotes y siendo fundamental en la tarea defensiva del equipo.
El ritmo del partido, a cargo de Landoswne y Kajami-Keane
Por último, podría mencionar a jugadores con buena mano como Uguak o Ongwae, que fueron claves para vencer sobre todo a Zaragoza, pero me gustaría aludir a los dos jugadores que dan el ritmo al equipo: Lansdowne y Kajami-Keane.
Sin ser un equipo sin bases puros al uso, ellos dos son los encargados de dirigir y llevar el ritmo del partido, siempre a posesiones cortas y gran velocidad.
Rodrigo Pastore, argentino de la casa
Como veis, es un equipo con muchas piezas importantes, y un equipo muy de autor, y ese autor es el carismático argentino Rodrigo Pastore. Pastore es el entrenador de Chemnitz desde la 2015-2016, es decir, lleva casi una década en el club y ascendiéndolos a la máxima competición hace 4 años, en la 2019-2020.
De esta manera , el ascenso de Niners Chemnitz ha sido meteórico, ahora dejando al club en tercera posición empatado con Alba Berlín y Bayern Munich.
Unos guarismos espectaculares para un equipo en franca progresión, bien dirigidos y que poco a poco se van haciendo un nombre en el panorama del baloncesto alemán y europeo.
