El regreso de la Liga Endesa para el Covirán Granada empezó con una mezcla de ilusión, emoción y lecciones por aprender. En el Palacio de los Deportes, el Joventut Badalona impuso su experiencia para ganar 75-87 en la primera jornada, y el nombre que más destacó no fue otro que el de Ricky Rubio, quien volvió a vestirse de verdinegro con autoridad. Pero más allá del resultado, quedó el recuerdo del regreso de Ricky Rubio a un escenario que lo vio debutar hace 20 años, y el esfuerzo de unos locales que nunca dejaron de pelear.

Luka Bozic de Coviran Granada© Coviran Granada | Fermín Rodríguez
Luka Bozic de Covirán Granada© Covirán Granada | Fermín Rodríguez

Desde el salto inicial, la Penya impuso su sello: defensa agresiva sobre el perímetro rojinegro, control del rebote y lectura pausada del juego. Rubio apareció pronto para ejercer mando: con seis puntos consecutivos cambió la dinámica y abrió un pequeño hueco (6-12) que fue creciendo hasta el 14-22 al término del primer cuarto. La penetración al interior y la protección del aro se le atragantaron al Granada, mientras Ricky y compañía ordenaban los ataques verdinegros.

El segundo período arrancó con la Penya manteniendo ventaja. Simon Birgander y Yannick Kraag aportaron solidez interior, mientras que el Covirán trataba de despertar. Ramón Díaz detuvo el choque tras verse abajo por 14 puntos, instantes en que su equipo respiró. Un parcial de 12-2, liderado por Luka Božić, recortó hasta un 29-32 enmarañando el dominio catalán. El descanso llegó con el marcador 32-34, una renta ajustada para un duelo que apenas había dado tregua.

En la reanudación se rompió el encuentro. Un arranque demoledor de 0-7 forjó el colchón verdinegro. Birgander dominó la pintura, mientras Ante Tomic recogía la antorcha ofensiva para ampliar la distancia. El Covirán volvió a aferrarse sin pausa pero siempre estaba intentando remontar el oleaje provocado por los hombres altos de Badalona. La distancia entró en los dos dígitos y el choque parecía decantarse.

El último cuarto fue un duelo de voluntades. Granada intentó incendiar el juego con momentos de inspiración: un parcial de 7-0 llevó el marcador a 66-72 cuando restaban cinco minutos. Pero las armas locales no bastaron: el triple les castigó (solo 4/18 en el partido), mientras la Penya respondía con calma. Rubio, Hunt y Hakanson asestaron el golpe final y aseguraron el triunfo. El partido concluyó 75-87 ante 7.489 espectadores.

Luka Božić brilló con luz propia: 22 puntos, 8 rebotes y 33 de valoración, una actuación estelar que, sin embargo, no bastó para remontar la partida. Rubio volvió con 18 puntos, 4 asistencias y 30 de valoración en apenas 19 minutos en cancha, y reafirmó su rol de líder.

El Joventut ganó con contundencia colectiva: intensificó su defensa exterior, protegió la pintura con eficacia y aprovechó la fragilidad local en los momentos calientes. Granada, por su parte, dejó entrever carácter, pero pagó caro su escaso acierto desde la línea de tres y la ausencia de liderazgos ofensivos clarificadores en Thomas, Kljajić o Hankins.

Granada tiene elementos prometedores: un entrenador nuevo, Ramón Díaz, que está construyendo un proyecto con urgencia tras la repesca a la ACB; jugadores nuevos que deben adaptarse rápido; Božić como líder que asume cada vez más peso ofensivo. Pero también que en el nivel más alto, los detalles —la regularidad defensiva, el tiro exterior, los rebotes en momentos decisivos— pesan mucho. De esos factores depende que partidos como el de hoy no se escapen.

Ramon Diaz, entrenador de Covirán Granada © Covirán Granada | Fermín Rodríguez
Ramon Díaz, entrenador de Covirán Granada © Covirán Granada | Fermín Rodríguez

Al final, el resultado fue justo para Joventut. También dejó una buena dosis de esperanza en Granada: la afición, el ambiente, el orgullo del equipo de luchar siempre. Si esos ingredientes se combinan con mejores tiradas de triple y menor desconcentración, este Covirán puede dar sorpresas.

Ficha técnica:

Coviran Granada: Micah Speight 8, Babatunde Olumuyiwa 4, Elias Valtonen 5, Matt Thomas 9 y Luka Bozic 22 – quinteto titular – Jonathan Rousselle 10, Travis Munnings 3, Jovan Kljajic 8, Zach Hankins 6 y Beqa Burjanadze 0.
Joventut Badalona: Guillem Vives 0, Sam Dekker 4, Cameron Hunt 13, Simon Birgander 16 y Adam Hanga 4 – quinteto titular – Henri Drell 10, Yannick Kraag 4, Ricky Rubio 18, Ludde Hakanson 5 y Ante Tomic 13.