Jorge Maril Carregal
A pesar del marcador final (77-86), el duelo fue más igualado de lo que pueda parecer y se decidió en los últimos compases del encuentro. La igualdad en el marcador fue la tónica habitual durante todo el encuentro. El jugador más destacado del Gipuzkoa Basket fue Josip Vrankic, con 19 puntos y 21 créditos de valoración, mientras que en el Obradoiro fue Brad Davison con 13 puntos y 16 de valoración.
El Amenabar Arena vivió un partido cargado de intensidad y emoción entre dos equipos que no estaban dispuestos a ceder. Gipuzkoa Basket y Monbus Obradoiro llegaban a esta jornada 6 de la Primera FEB con victorias recientes y la ambición de seguir escalando posiciones, en una competición donde ambos aspiran a estar en lo más alto.
Desde el primer cuarto, quedó claro que sería un duelo parejo. El Obradoiro empezó tomando la delantera con pequeñas ventajas, pero cada vez que intentaba despegarse, Gipuzkoa respondía con canastas clave para no perderle la cara al partido. Cuando Manex Ansorregi tuvo la oportunidad de empatar con un triple en los segundos finales, la pelota no quiso entrar, y el cuarto se cerró con un ajustado 19-22 a favor de Obradoiro.
El segundo cuarto no fue muy distinto. La igualdad continuó y el marcador iba cambiando constantemente, con los dos equipos luchando por cada punto. Gonzalo Rodríguez, técnico del Obradoiro, viendo que su defensa empezaba a flojear, pidió tiempo muerto para reorganizarse tras un empate a 33. Pero, después de esa pausa, fue Gipuzkoa quien tomó las riendas, aprovechando los pequeños errores del rival para ponerse por delante. Así, llegaron al descanso con un 44-40, aupados por el aliento de su afición.
Tiempo de reponer fuerzas
Tras el descanso, el equipo gallego salió con energía renovada y un parcial de 0-6, encabezado por Micovic y Davison, les permitió tomar la delantera otra vez (44-46). Pero un triple de Johnson volvió a poner a Gipuzkoa en el liderato. El marcador continuó apretado hasta que una falta antideportiva y un parcial de 0-7 dieron aire a los gallegos, que consiguieron terminar el tercer cuarto con una ventaja de 61-65.
El último cuarto fue definitivo. Aunque Gipuzkoa intentó remontar con un 2+1 de Mateo Díaz que les acercó a un punto, Obradoiro no estaba dispuesto a dejar escapar la victoria. Los gallegos comenzaron a imponerse, mostrando un gran acierto en el tiro y controlando el ritmo del partido. Con un triple de Varela, lograron una ventaja de 12 puntos (70-82), que prácticamente sentenció el encuentro a falta de dos minutos. Gipuzkoa no dejó de pelear hasta el final del encuentro, pero un último triple de Varela selló la victoria de Obradoiro por 77-86.
