Si algo es bien sabido es que Ibon tiene un plan, pese a derrota en el primer partido de pretemporada contra Benfica se han visto detalles tácticos interesantes, que probablemente podamos ver durante la temporada.

El primer partido de pretemporada de Unicaja bajo la dirección de Ibón Navarro nos ofrece una ventana fascinante al enfoque táctico que podría definir la temporada del equipo. Con un énfasis claro en el ataque, Navarro desplegó varias estrategias que son clave en el baloncesto moderno, incluyendo las series Horns y Wave. Este artículo profundiza en estos sistemas ofensivos y cómo fueron implementados por Unicaja en su primer encuentro.

Serie Horns: Flexibilidad en el Ataque

La serie Horns es una estructura ofensiva popular en el baloncesto que proporciona múltiples opciones de ataque desde una formación inicial fija. En este sistema, los jugadores se colocan en una formación que parece un “cuerno”, con dos interiores en la parte alta de la llave y dos exteriores abiertos en las esquinas. Desde esta disposición, Ibón Navarro utilizó varias variaciones que permitieron a Unicaja generar oportunidades tanto dentro como fuera de la pintura.

Durante el partido, se observó cómo los interiores de Unicaja utilizaban pantallas para liberar a los exteriores o crear espacios para ellos mismos en la zona. Esta serie no solo facilita tiros abiertos desde el perímetro, sino que también permite entradas dinámicas hacia el aro, explotando la defensa rival. La flexibilidad de la serie Horns permite adaptarse rápidamente a la reacción de la defensa, manteniendo a los rivales siempre en desventaja.

Serie Wave: Movimiento Continuo y Desgaste Defensivo

Otra serie destacada en el análisis de Ibón Navarro es la serie Wave, un sistema que se basa en el movimiento continuo de los jugadores, especialmente de los exteriores. En este esquema, los jugadores realizan cortes y movimientos en zigzag a través de pantallas, lo que no solo abre espacios sino que también desgasta a la defensa, obligándola a trabajar constantemente.

En el partido de Unicaja, Navarro utilizó la serie Wave para mantener el ritmo ofensivo y crear desajustes defensivos. Este movimiento perpetuo obliga a la defensa a comunicarse y reaccionar rápidamente, a menudo generando errores que Unicaja supo aprovechar para conseguir tiros claros o penetraciones al aro. Es un sistema que, cuando se ejecuta con precisión, puede desmantelar incluso las defensas más organizadas.