Roger Grimau no había atendido a medios de comunicación tras su salida como entrenador del primer equipo del Barça. El técnico ha dado su punto de vista de una temporada complicada donde las cosas no han salido como esperaba y con varios puntos interesantes a comentar.

El técnico ha atendido a los micrófonos de RAC1 y Catalunya Radio para hablar de lo sucedido y además se ha defendido y reivindicado porque seguramente no fue tratado como merecía. Haciendo además autocrítica y reconociendo que hay cosas que «podían haber sido mejores», también ha afirmado que «hubieron momentos de juego brillantes».

No ganar títulos y que el eterno rival se lo lleve casi todo, siempre es sinónimo de que es complicado seguir, pero Grimau se siente satisfecho del trabajo hecho, considerando que «en muchos momentos he hecho muy bien a los jugadores» y con la satisfacción de haber preparado siempre los partidos de la mejor forma posible.

Grimau esperaba haber cumplido los dos años de contrato que firmó y esperaba este segundo año para «intentar hacerlo mejor», pero tras la eliminación a manos del Real Madrid «pasó una semana y yo ya me lo imaginaba, pues en toda la semana no habíamos hablado del año siguiente». Su cese era una decisión firma y el club quería un nuevo cambio de rumbo.

Lo más impactante ha sido cuando Grimau ha afirmado que cree que se la ha faltado al respeto mucho desde el primer día, sin señalar a nadie en concreto y dejando todo a la interpretación. Grimau ha afirmado que «había gente que no quería que me fuera bien y era un blanco fácil, con cosas que no fueron justas».

Ahora solo espera seguir entrenando y disfrutar del baloncesto desde el banquillo, demostrando estar al nivel para coger un equipo que confíe en él de cara al futuro.

Otro de los puntos calientes era la situación con Willy Hernangómez y el incidente que desvelaron «Bar Canaletes» donde Willy Hernangómez tras un partido en Mónaco le dijo que le quedaban dos telediarios como entrenador blaugrana.

El descontento de Willy lo mostró públicamente pero Grimau le quitó hierro al asunto ya que considera que son «cosas puntuales, pero muy escandalosas para el público». La intención de Roger siempre ha sido que «Willy fuese un hombre importante y que jugara a gran nivel para ganar títulos, pero los minutos son los que son y Vesely estaba haciendo una gran temporada».

Al pasara aquello, el técnico decidió no apartar al Willy por «ser un jugador top o franquicia en el que se habían gastado mucho dinero y la solución de apartarla no era la adecuada pensando en el equipo y en el club».

Ahora le toca de nuevo esperar su oportunidad para demostrar el nivel de entrenador que es y lograr un proyecto que confíe en él de cara al futuro.