El UCAM Murcia CB ha cerrado la renovación de Will Falk, asegurando la continuidad del alero sueco hasta 2028. Falk, de 22 años, es uno de los jóvenes talentos surgidos de la cantera universitaria, y su vínculo con el club refuerza la apuesta del club por mantener jugadores formados dentro de su propio proyecto deportivo.

Falk llegó a Murcia en marzo de 2020, con tan solo 16 años, procedente del Boras Basket sueco y tras una rápida etapa en el Stellazzurra Roma sub-18, con el que jugó 4 partidos del Torneo Adidas NextGen. Desde su incorporación a la cantera, el alero ha demostrado disciplina, constancia y un notable crecimiento competitivo que le ha permitido consolidarse como una pieza interesante para los planes de futuro del equipo.

Durante las últimas temporadas, Falk ha superado obstáculos importantes, incluyendo dos operaciones de rodilla y una peritonitis, lo que retrasó su progresión en ACB. Sin embargo, su determinación y compromiso con el club nunca han flaqueado. Desde la dirección deportiva tanto Sito Alonso como Alejandro Gómez han defendido la competitividad y el carácter del joven jugador, subrayando tanto la versatilidad del jugador (capaz de actuar como alero o ala-pívot), como su capacidad defensiva y su energía constante en el juego.

Recorrido hasta llegar al primer equipo

La pasada temporada, Falk salió cedido a Hestia Menorca en Primera Feb, equipo en el que apenas tuvo protagonismo. En febrero de este año, optó por cambiar de aires y bajo propiedad del UCAM Murcia, bajo un escalón para jugar en Segunda FEB con Bisbal Básquet. En 8 partidos promedió 15,5 puntos y 7,5 rebotes. Regresó de su segunda cesión antes de que finalizara la temporada de ACB para el equipo murciano, y el sueco pudo disputar 3 partidos en los que dejó buenas sensaciones, y su anotación más alta en Liga Endesa hasta el momento (6 puntos contra Gran Canaria).

En la presente temporada 2025-2026, Falk se ha consolidado en la rotación del primer equipo, convocado en todos los partidos de liga con una media de 9:21 minutos, aportando 1,6 puntos y 2 rebotes. En la FIBA Europe Cup, su rendimiento ha sido más destacado, promediando 17:10 minutos, 5,8 rebotes y 4 puntos por encuentro. Pero más allá de los números, el sueco ha brillado por su intensidad defensiva y su compromiso con la filosofía del UCAM, convirtiéndose en un jugador válido para la rotación tras la lesión de Gates y la adaptación de Hicks a Europa.