El Barça no desaprovechó la oportunidad y venció a Virtus para colarse en los cuartos de final de la Euroliga de forma directa donde se enfrentará a Mónaco por llegar a la Final Four.

Su victoria, acompañada de la de Efes sobre Zalgiris, les hace acabar en quinta posición, nada mal para el complicado año que están viviendo los de Peñarroya y que les hace tener esperanzas de llegar a la Final Four si hacen las cosas bien ante el conjunto monegasco.

Empatado a victorias con Efes y Real Madrrid, su mejor «basket average» les otorga esta mejor clasificación y le hace cruzarse con previsiblemente el rival más asequible que podría encontrar, sin olvidar que los del Principado son un equipo complicado que tienen a Mike James como estandarte.

La Virtus Bolonia visitaba el Palau sin opciones de nada, pero jugar sin presión para este equipo es una bendición. El inicio del partido fue igualado pero los cambios no sentaron bien a los italianos que vieron como el Barça abria brecha en el marcador con un 10-0 de parcial para tomar una renta de 12 puntos.

Los puntos de Holiday y Shengelia mantuvieron dentro del partido a la Virtus, pero con el Barça siempre comandando el marcador, consciente que no podían desaprovechar la victoria de Efes ya conocida en al Palau. Al descanso 45 a 38 pero el equipo visitante dando muestras que quería salir victorioso del Palau.

Así arrancó el tercer cuarto, con Clyburn anotando y con Punter y Satoransky ayudando al Barça a no ponerse nervioso para mantener la ventaja. La mejor noticia era el regreso a la cancha de Vesely tras semanas de lesión y su aportación era como si no hubiera faltado todo este tiempo. Gran noticia para el Barça contar con el checo.

Con todo prácticamente decidido, apareció una nueva desconexión blaugrana. Esto lo aprovechó Holiday para empezar a anotar y con un parcial de 3 a 13 poner a los italianos con una ventaja de cinco puntos. El Palau, hasta entonces una fiesta, enmudeció a cinco minutos del final, conscientes que perder era meterse en el lío del «play in».

Logró darle la vuelta al marcador con los puntos de Brizuela y el buen final del partido de Jabari Parker, que hasta ese momento había tenido un partido bastante malo. A pesar de eso se jugó las últimas acciones con acierto y la victoria y el Playoff se quedaron en Barcelona.

Ahora toca seguir trabajando a los de Peñarroya para volver a la Final Four, dos años después.