Juan Antonio Rodríguez Ordóñez
Las Liberty de Ionescu se han proclamado campeonas de la WNBA desatando la locura en la ciudad de Nueva York que celebra un anillo de baloncesto tras 50 años de sequía. Han ganado el partido definitivo en la prórroga ante Minnesota en un partido de muchos nervios y pocos puntos (67-62).
Las New York Liberty sin un gran partido de Sabrina Ionescu se han impuesto a las Minnesota Lynx que buscaban su quinto anillo pero que se han visto superadas por la dureza de las newyorkinas y con un final de infarto que da más peso al triunfo de las de la Gran Manzana.
Y eso que la Lynx acariciaron ese quinto anillo ya que a falta de cinco segundos ganaban por 58 a 60. Pero apareció Breanna Stewart para demostrar la calidad que atesora y mandar el partido a la prórroga tras dos tiros libres que sacó con una dudosa falta. Luego en la prórroga solo nueve puntos entre ambos equipos, señal de los nervios que se vivían sobre el parqué.
La franquicia ya estaba tardando en levantar el título, tanto en masculino como en femenino y el año pasado Las Vegas Aces dejó con la miel en los labios a Ionescu y compañía. Todo en un año donde los focos han estado en Caitlin Clark.
La otra gran estrella de esta liga, Sabrina Ionescu, no ha tenido su día pero a pesar de no tener su día en anotación, pero ha aportado en otras facetas, capturando 7 rebotes y repartiendo 8 asistencias y ayudando así a su equipo a remontar una diferencia que ha llegado a ser de 12 puntos. Y eso en un partido de tan pocos puntos es una gran distancia.
La MVP de las finales ha sido Jonquel Jones, que ha anotado 17 puntos, y Breanna Stewart suma su tercer anillo y cierra un gran año en la que se ha colgado también el oro en los Juegos Olímpicos de París 2024 donde fue una de las mejores.
La buena actuación de Napheesa Collier con 22 puntos y los 21 de Kayla McBride por parte de las Minessota Lynx no han servido de mucho y tras llegar ganando al descanso no han podido seguir por delante y tras el empate de Stewart en la prórroga no han podido hacer mucho y se quedan sin ese ansiado quinto anillo.
Destacar también la aportación de Leonie Fiebich, ex jugadora de Casademont Zaragoza, que tuvo una seguidora de lujo, Vega Gimeno, que no se ha querido perder estas finales. La alemana ha demostrado en su año rookie que tiene sitio en la WNBA y muchos esperan que este equipo pueda aspirar a llevarse algunos anillos más en el futuro.
