Juan Antonio Rodríguez Ordóñez
Vega Gimeno es una debilidad para el equipo de Campo Atrás. No tener un no por respuesta y transmitir un amor tan grande por el baloncesto como el de todo nuestro equipo tienen mucha culpa de ello.
Antes de empezar el verano nos dejó helados con su retirada del 5×5, ya que ha demostrado estar a un gran nivel y poder competir con las mejores tanto el Liga Endesa como Euroliga. Pero el cuerpo y sobre todo la cabeza parecen haberle dicho a este tipo de baloncesto para centrarse en el 3×3.
La decisión no ha podido ser más acertada, con una Plata Olímpica en París y un Oro Europeo en Viena. Dos medallas importantes para esta modalidad de baloncesto que tanto defienden Vega y sus compañeras.
Y acabado el verano la pregunta está clara: ¿Y ahora qué? Y como siempre, Vega es clara en sus declaraciones preguntada sobre la posibilidad de llegar a Los Ángeles 2028.
En un encuentro con los medios en la Fundación Trinidad Alfonso, la jugadora afirmó: “Mi intención es ver cómo estoy. Iré poco a poco y me iré planteando verano a verano No digo que no al cien por cien. Tengo cierta experiencia y prefiero ir viendo cómo estoy verano a verano sin estar compitiendo durante el año pero de momento sí que me gustaría seguir en el 3×3”.
Eso es dejar la puerta abierta si consigue mantenerse en forma y seguir con un plan específico para llegar al verano en las mejores condiciones que es cuando se disputan la mayoría de torneos 3×3. Ahora aun quedan las World Series de China y entre bromas dice que sería la guinda a un verano perfecto, pero con lo conseguido ya se pueden dar con satisfecha.
Tras el esfuerzo hecho ahora dice Vega, “Vamos a disfrutar porque vamos en muy buena dinámica, el objetivo es intentar ganar pero personalmente lo que quiero es disfrutar”, aseguró.
En este acto era obligado repasar lo sucedido en París, donde ha reconocido que el objetivo era llegar a cuartos pero fueron directas a la semis y de ahí a la final. Alabó el “gen competitivo que otros países no tienen” como una de las claves de esta medalla.
Así pasaron de la sorpresa por no verse en semifinales a la alegría de conocer tras la comunicación de un comisario de la FIBA que entraban en la lucha directa por las medallas, algo impensable si recordamos como reconoció Vega en lo hablado antes de la final que “Veníamos de clasificarnos con una canasta de espalda y de que era el único partido en el que íbamos a poder disfrutar porque en el resto sales con el cuchillo entre los dientes y se te pasa muy rápido”.
Ahora tocará ver como pasa el tiempo para poder ver a Vega defender la camiseta de España en los próximos Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028 donde todos esperamos verla.
